lunes, 31 de octubre de 2011

Un domingo diferente


Ayer, después de enterarnos a la madrugada que se posponía el asado planeado con amigas,propuse un paseo a un escenario diferente. Algún lugar con árboles y ecos de charlas entre desconocidos, un lugar que oliera a pasto recién cortado, o a pensamientos revueltos luchando por ordenarse.
Encontramos el lugar, y mi mente estaba muy lejos de allí. Compartimos un almuerzo muy frugal:sandwich de arrollado de carne,aceitunas,jamón crudo, el infaltable queso crema y una ensalada inventada de queso, gajos de naranja y esparragos. 
Mientras disponíamos la manta, los vasos, el agua, la gaseosa, me preguntaba a mí misma si tanta estabilidad no acalambra los sentidos.
Que pasa cuando no pasa nada?, Mi mente se hecha a volar y lo más inocente que hago es por poco no planear y diagramar mi propia vejez.
Y es como si la estuviera viviendo, siento el peso del cuerpo, las experiencias apiladas como cajones dentro de mí, la nada misma hociqueando mis secretos más íntimos, y temo regresar a la vida real, temo acceder al pedido de mi pareja de comprar el diario, porque me preocupa que ese acto, ese inmaculado acto de consentir a la persona que amo, me acerque irremediablemente a la vejez de la que tanto quiero huir.
Todo ésto no significa que para mí la vejez no tenga mérito, pero la prefiero en otras personas, la prefería en mis abuelos por ejemplo.
Recuerdo la dificultad de mi abuelo para bajar del auto, y en éste momento de mi vida, cuando me duelen los huesos al levantarme de la manta que hemos tirado en el suelo, o pienso dos veces para agacharme a recoger alguna cosa, siento que me está pasando a mí, lo que creía tan lejos. 
Pasaban las horas, y entre mis idas y vueltas con pensamientos y el fondo del paisaje con montañas en 10 tonos de azules, llegó el momento de tomar el té. Me azotó como un rayo la pregunta de si la persona que tengo al lado siempre iba a ser así. Si cuando pasen los años sus mañas y las mías no se iban a poner peor. 
Miré a lo lejos, y la bruma del aire materializó mis sentimientos.
Así estaba yo, brumosa e inconclusa como una novela a medio acabar, como un cuento de misterio en donde el autor no conocía el final. 
De repente la pregunta: "leche, té o malta?" me sacó de mi nube. Y regresé con los colores del rostro un poco idos, balbuceando y mirando fijamente la cara de mi pareja, para saber que era cierto, que ella era la que me estaba hablando.
Había strudel de manzanas para acompañar la media tarde, estaba riquísmo. Me alegré de tenerla cerca para no dejarme ir tan lejos de ahí.
En fin...una tarde muy linda, mucha paz, y buena comida. Como a los viejos les gusta... Glup!

       Besotes a todas!

                      

viernes, 28 de octubre de 2011

Escritos en sepia


Tenía 15 años cuando escribí ésto. Por alguna razón, he encontrado viejos escritos...                     

                     AGOSTO

Agosto, se introdujo en mi cuerpo...
y dejó a su paso la sombra.
Clavó en mi alma un reto,
cual daga hirviente,como un comienzo.
Será que su máscara fué de naufragio
hundiendose,como una embarcación enferma,
Pero su verdadera cara,era una lejana canción de triunfo?
Agosto,que tambaleaste sobre tus propias letras.
No debiste dejar de brindar un sitio tranquilo donde no golpearan los vientos.
Sin querer, permitiste que tu nombre se moliera,
como una hoja,bajo un paso apresurado,
Hilvanaste tristemente el deber y la poesía;
entrecruzaste los días, haciendo en mi memoria remolinos.
Agosto,le hallaste valor al encuentro de mis propios pasos perdidos y tu alimento fueron mis vanos esfuerzos por despertar de tus pesadillas.
Tus últimos días,reflejaron la agonía de un sueño...
Me despedí de tí,arrojando por el suelo los momentos vividos
y en una misteriosa calma,te volví la espalda...


                             Besotes a todas!

                             

miércoles, 19 de octubre de 2011

Vamos amor, que llegamos!


Hacía tanto que no hablabamos amor, de vos, de mí; como antes, como cuando nos sentabamos en la semipenumbra de algún departamento alquilado, cerveza, cigarrillos y sinceridad de por medio.
No nos hacía falta vernos a la cara, nos conocemos los gestos de memoria; sólo hacía falta abrir el corazón y decirnos las cosas tal cual eran.
Y anoche volvimos a encontrarnos en una semipenumbra. Han pasado tantas cosas..., nos dijimos mutuamente. Aún así, reconocí en vos a esa mujer que yo elejí alguna vez, la noté un poco cambiada, algunas cosas la han entristecido, otras la han hecho más valiente.
Por mi parte, te mostré el eterno peter pan que supo seducirte con su jovial sentido del humor, y las ideas tan claras.
Seguís teniendo esa fuerza incombatible para hacer que yo quiera hacer cosas nuevas, probar diferentes alternativas, y siempre siempre dandome fuerzas.
He cometido errores, lo reconocí abiertamente, me equivoqué, y te lo dije. 
Me dijiste que vos también habías pasado por alto, y equivocado un montón de cosas.
Hablamos largamente de nuestros destinos, de los recursos que poseemos para seguir juntas, de las ganas de reconstruir la relación, coincidimos en que luego de mi enfermedad, la relación se había desgastado, tenía agujeritos y hemos quedado con los nervios de punta.
Estamos sensibles, pequeñas cosas nos afectan demasiado, y tenemos que aprender a relajarnos, a estabilizarnos. 
Hablamos de nuestro futuro juntas, de tus ganas de tener hijos, y de mi deseo de hacer cualquier cosa para que seas feliz.
Tu voz sigue enamorandome demasiado, al escucharte, ese sonido inconfundible de tu voz me hace latir el corazón a mil por hora.
Tenemos que cambiar algunas actitudes, mover de lugar otras, aprender un par de detalles que se nos están escapando, yo por mi parte estoy dispuesta a todo. A quemar las naves como quién dice.
Fué una charla como tantas otras, me aceptaste de nuevo, con mis errores, con mis aciertos, con mis ganas de seguir adelante y apostar a lo nuestro. Me volví enamorar de vos, de ese modo tan sensible que tenés de ser. Recordé que solamente una mujer puede hacerme razonar de semejante manera, esa mujer sos vos.
Te pedí paciencia, me pediste responsabilidad y que hagamos conciencia que no tenemos 20 años.
Te entendí, y voy a darte todo el respaldo que te haga falta, toda la contención y el amparo que necesites. Pero yo también necesito algo, y es saber que no te voy a perder nunca, pase lo que pase; aparezca quién aparezca.
Hemos recomenzado, vamos por el quinto año juntas, y apostando cada vez a más.
Fué una charla hermosa, gracias amor, por entregarme tu alma una vez más. Por ponerme los límites justo a tiempo, simplemente gracias.


                               

martes, 18 de octubre de 2011

Sólo un beso...


Quiero un beso, pero no un beso a las corridas, ni tampoco un beso pasajero. Yo quiero un beso claro, un beso que refleje el mar en tus ojos, un beso con olor a café y naranjas de un desayuno; lo quiero lento, que me permita contar todas tus sonrisas y leer en tus labios, la manera de darte todo lo que necesitás por el resto de tu vida.
Y yo necesito un beso, un solo contacto, la posibilidad de transportarte a un mundo imaginario, de que puedas saborear la nieve de una montaña remota quizá, recorrer su cima, oyendo el canto de mil pájaros exóticos mientras me besas.
Un perfume de hechizo, una magia interminable. Envolvernos en un abrazo que nos proteja, sentir tu aliento fresco, volcar el infinito en ese beso.
Un beso de coco, de comida recién hecha, de ternura en tus manos; Un beso de susurros, de permanencia en el tiempo, de rendición instantánea.
Hace días que lo pienso, y mientras más lo pienso más lo necesito.
Nunca imaginaste dar un beso de agua, un beso cristalino, que corra por nuestras bocas como lo hace un río... o quizá un beso de arena, un beso de arena fina que se escurra entre tu vida y la mía.
Es tan simple y tan complejo mi pedido, tan atroz y tan humano.
Lo que yo necesito no se piensa demasiado, nace de una mirada, de un roce. Nace y muere con tu voz y con la mía.
Es sólo un beso frágil, eterno, deseado. La combustión perfecta de tus ganas y las mías, la arrolladora experiencia de depositar confianza en otro ser humano.
No dejo de querer ese beso, de esperarlo, de planearlo. Y soñaré despierta cada nuevo día, inventando las excusas para dartelo.
Yo sólo quiero un beso con sabor a moras, de esos besos que traen consigo tantas historias, tantos viajes, tantos lugares.
Un beso que parece cansado, y de la nada retoma fuerzas, un beso fugitivo de tus propios miedos y de los míos.
En fin...sólo un beso quiero yo.                     

                              Besotes a todas!
                                 
                              

sábado, 15 de octubre de 2011

No quiero



... Estoy perdida, sin siquiera un libro que me rescate, sin mis infaltables piratas que luchan por poseer algún tesoro. Sin mi detective privado que me resuelva el caso.
Obligada a caminarme por dentro, a dar vueltas en círculos dibujando en mi mente paisajes de playa. Las puertas que abro, no son tales, sino sueños que repetidamente me aburren.
Y las dudas como duendes juegan a las escondidas creando miles de acertijos, y yo siento que corro de arriba para abajo tratando de adivinarlos y no lo consigo.
Como darse cuenta cuando una en verdad, no quiere?. Como atreverse a decirlo?. Las luces iluminan, todo brilla en mil colores y me maldigo por no querer; me digo que todo es perfecto que es el momento ideal, y sigo no queriendo. Detesto arruinar las fiestas, la magia, detesto romper la pecera de cristal donde nadan tan armoniosamente las circunstancias. No querer tiene su precio, pero por ahora mi miedo lo mantiene preso en cárcel de máxima seguridad a ese no querer tan intenso. Y para peor de males se tragó las llaves de la celda.
Quiero soledad y no la quiero; quiero que estés conmigo pero no quiero; quiero mis tiempos pero no quiero.
Quiero alejarme, pero no quiero. Quiero empezar de nuevo pero no me atrevo. Seguir manteniendo ésto se me hace cada vez más pesado. Por momentos soy feliz, y luego caigo de narices en el asfalto. Pienso que me falta algo, pero se supone que lo tengo todo. Y tapo y tapo. Cubro ese agujero negro que me carcome el alma con café y juegos de bowling, y dejo que el vals continúe indefinidamente. Cuando algo amenaza con mostrarme la verdad, huyo como un conejo y me tapo la cara, los oídos y me escondo.
Me rodeo de gente, de mucha gente para no pensar, para no sentir el vacío. Pero se supone que lo que tengo me gusta, que lo que hago me agrada, que lo paso bien, que lo disfruto...
Se supone mal, algo me falta.
Y me pregunto que será, que será lo que no tengo y tanto necesito?

                        Besotes a todas!

                           

miércoles, 12 de octubre de 2011

Desempolvando recuerdos...


Día de poner un poco de orden a mi escritorio y mi armario. Entre muchas otras cosas, encontré guardado en el fondo de una caja, un diario; mi diario, uno que solía escribir con mi madre y que iniciamos juntas allá por el año 81. Fué su idea, una brillante idea por cierto, que me permite ahora recordarme y reconocerme por aquellos tiempos, cuando tenía la edad de 7 años.
Podría decirse, que desde muy temprano ella fué la que me inició en éste apasionante mundo de las letras y los pensamientos. Recuerdo que solía preguntarme siempre: "que estás pensando?" mucho tiempo después aprendí, que poner los pensamientos y sentimientos en palabras ayuda a aclarar las ideas y el alma. Ella siendo docente siempre supo ver en mí la capacidad de expresarme verbalmente y por escrito, cualidad que en la escuela primaria me hizo formar parte de algunas bibliotecas, y pertenecer al grupo "Merceditas" el cual se encargaba de leer para toda la escuela las novedades del día unos minutos después de bajar la bandera, éste pequeño acto simbólico duraba no más de diez minutos, pero evidentemente que eso en mí forjó el amor por el mundo literario.
Volví a leer ese diario, y recordé que solía ser una personita muy intransigente, con un carácter muy fuerte por aquellos tiempos, al parecer la libertad siempre fué una cosa muy importante para mí. Detestaba las injusticias y si algo no entraba dentro de mis cercanos límites de tolerancia, los arrebatos de furia hacían estragos en mí.
Ese diario prosperó a traves de los años, intercalábamos las escrituras, una vez mamá, y luego yo, como un eterno dialogo continuado. 
El último escrito fué de mamá, el dieciseis de diciembre del año 92, luego una página arrancada... y al parecer me apropié del diario, porque empiezo a escribir yo sola.
Y aquí empieza la aventura de escribirle a una mujer. A mi primer mujer. A mi algo más que compañera, que por aquel entonces me robó el corazón. Por escribirle a ella, porque sentía que nadie podría entenderme, por sentirme tan sola y tan distinta, por no saber que mi gusto por las mujeres se había instalado en mí para siempre y que no era algo malo, por todo eso y porque mi mente era una maraña de confusión y dudas, yo desaparecí el diario de las manos de mi madre. 
Es increíble leer las palabras con las que  acompaño la espera para poder estar con ella por primera vez , los nervios, la ansiedad, la dulzura, su cuerpo, que al sentirlo me hizo casi desmayar y luego la despedida final, para no verla nunca más. Un relato que conmovería a cualquiera, sin mencionar que separarme de ella, fué casi como morirme por dentro y me tomó años recuperarme.

..."  Tengo que resignarme a perderte de a poco y tal vez para siempre, te juro que has sido lo mejor que me ha pasado en la vida, te re quiero y mucho más que eso por todo lo que me has dado , porque te adoro y llenaría infinitas veces mis pulmones con el viento, para repetirte incansablemente lo que siento, TE AMO.."

wuauu! (está copiado tal cual está escrito en el diario)
Cerré el diario con cuidado, y salí a dar una vuelta para despejarme un poco, la tarde es gris y amenaza con lluvia en cualquier momento.
Mi realidad hoy es otra mujer, pero mi capacidad de amar sigue siendo tan grande como hace tantos años, Que barbaridad! pensé, quién sabe si hoy la vida me la pone delante y no me mueve un pelo. o quizás si...
Mejor me tomo un respiro y veo alguna peli divertida para cambiar los pensamientos, porque esos ojos verdes que en la secundaria me hicieron perder la cabeza, pueden meterme en grandes problemas hoy.
Diarios... diarios personales, secretos ocultos muy bien guardados, trozos de vida que emergen de esas hojas amarillentas y a cuadros, que nos deparan sorpresas, que nos muestran una parte casi olvidada de nosotros mismos.

                          Besotes a todas!

                            

miércoles, 5 de octubre de 2011

"Lo de siempre!": En el bar de Fer


Y ayer fué tarde de café, infaltables en el bar de fer, un tipo flaco, despreocupado, que nos saluda siempre tan amable, y ya sabe lo que queremos: un manchado mediano en vaso, y un café chico cargado, 2 vasos de soda gigantes, y dos medialunas. Siempre igual, siempre pedimos lo mismo. Al bar de fer vamos dos veces a la semana, ahí nos encontramos con Juanjo, y con Guille, uno es hetero y el otro gay. Dos tipos macanudos. A Juanjo lo conocimos en un viaje que hicimos a mardel, viajaba solo, y en la primer parada de descanso, mi radar me alertó de su condición (odio decir así, que se sepa).
Nos hicimos una seña con cari y lo invitamos a sentarse con nosotros en la mesa. Resulta que la cena en ese viaje era en un viejo restaurate de ruta, y el mozo un antipático y odioso sesentón, que se notaba hacía siglos no tenía una alegría. El menú: milanesas con papas fritas y ensalada. La bebida corría por nuestra cuenta, y pedimos una coca de litro. 
No tardamos nada en la pregunta de rigor, y Juanjo nos dijo que era gay y que viajaba de vacaciones. 
Durante el viaje de ida, nos reuníamos a charlar en las paradas obligadas del colectivo. El estaba a unos cuantos asientos más atrás, asíque mientras estabamos arriba, no teníamos oportunidad.
Lo bueno es que cuando llegamos a mardel, nos tocó en el mismo hotel. Y mensaje va, mensaje viene, empezamos a  bajar juntos a desayunar todos los días y a ir juntos los 3 a todos lados. 
Lo pasamos maravillosamente, y de ahí quedó la amistad, a la que le rendimos honores 2 veces por semana en el bar de Fer. El siempre pide un cortado madiano en vaso con alguna medialuna o sino solo. 
Guille es un caso aparte, "el pela" trabaja en un diario de corte ambientalista, está entusiasmado conmigo para que escriba columnas en ese diario, primeramente publicar mis trabajos, y probar.
Me ha dado todos los datos de un tal Gustavo.... director del diario, que reside en baires, porque se imprime allá, y yo tendría que mandar mis escritos a su editorial.
Ha sido acompañante terapéutico muchos años, por lo cual la filosofía y la psicología son su forma de expresión. Mantenemos charlas existenciales interminables, y ahora últimamente le ha dado por la sabiduría Indú. Estoy aprendiendo algunas cosas interesantes, y él me pregunta sobre el punto de vista homosexual de la unión de las parejas, o sobre el complemento entre mujeres. O sobre mi opinión en cuestiones politicas e internacionales.
El "Pela" es alemán por parte de madre, está escribiendo un libro sobre su abuelo y la época de los campos de concentración.
Tiene una banderita alemana en su gorra, y yo le doy mi opinión sobre la forma de editar o de escribir algunas partes difíciles.
No me ha mostrado el texto crudo todavía, pero creo que está haciendo un gran trabajo. Como ya imaginarán, no es fácil ordenar cronológicamente los hechos, cotejar con la historia de un país y además ponerles sentimientos cuando se trata de recuerdos de infancia y hay conflictos familiares en el medio.
Nos ha invitado a cenar a su depto, para seguir charlando, le voy a prestar mi vieja máquina de escribir, porque detesta las computadoras y todo lo escribe a pulso. Vamos a ver si eso, le hace ganar un poco de velocidad...
Tarde de café la de ayer, momento para alimentar el alma, refugio de ideas logrando expresarlas de un modo muy grato. Veremos que sucede...

                     Besotes a todas!